imágenes Santiago Garcés

Visité Luxemburgo el verano pasado, me habían contratado para tomar unas fotos. El trabajo fue sorprendentemente rápido, por lo que me quedó tiempo de sobra para visitar los hitos del Gran Ducado, que eran tan pocos que en menos de una hora me quedé de nuevo sin saber qué hacer. Afortunadamente recibí una invitación de parte de los que me habían contratado: ir al campo a una carrera de coches. No una carrera cualquiera: los ruidosos automóviles chocaban constantemente entre sí en pistas accidentadas cubiertas de lodo. Cuando la colisión era un poco más grave, la gente empujaba el vehículo hacia unos improvisados pits, donde las cosas parecían solucionarse con un par de martillazos. Nunca esperé que éste fuera mi gran souvenir del viaje.