A taste of class
I. Rubi
Una soleada tarde al final del verano nos encontramos en Licorería Limantour para tomar el té “con clase”, que en este caso significa como parte de un drink.
Rubi León, Brand Manager de Twinings México y oriunda de Culiacán, confiesa que antes era bebedora de café. Sin embargo, ahora bebe más de 20 tazas de té a la semana. Vivió en Guadalajara y Argentina, y gracias a su familia viajó por México desde pequeña. Una vida poco estacionaria ayudó a entrenar su paladar y encontró un nuevo aprecio por esta bebida que asegura es rica en historia, variedad, versatilidad de sabores, temperaturas y combinaciones. Al preguntarle con que té se identifica, dice que sería un English Breakfast, nada más y nada menos que el ícono de Twinings: sencillo, directo y dulce, sin empalagar. Confirma que hay un té para cada ocasión, y así, cuando tiene un mal día, se toma un Twinings manzanilla, miel y vainilla al cual equipara con un abrazo. Pero si se trata de enviar té a la familia, opta por infusiones en frío para refrescarse mientras acompaña una rica machaca o los tamales que seguido añora. Finalmente, nos comparte que aquel que quiere conocer más sobre esta bebida, debe antes que nada aprender a prepararla.
II. Master Class con Andrés Jurado
Andrés Jurado, sommelier de Twinings para México y codirector de la Escuela Mexicana del Té, está abriendo un camino prácticamente desconocido pero emocionante. Su abuela, como quizá algún día la de todo mexicano, le dio té de manzanilla para curar un dolor de estomago. Sin embargo, Andrés nos asegura que solo se llama té a aquel que viene de la planta Camellia sinensis, y que el llamado por algunas marcas té de manzanilla, es realmente una tisana. Instruir en el arte de tomar té a una cultura que más que nada conoce a esta bebida por sus propiedades medicinales es en gran parte el reto que enfrenta Twinings. Y aunque efectivamente confirma que hoy tomar té está de moda porque es sano y entre otras cosas combate radicales libres gracias a sus antioxidantes, escucharlo hablar de té deja claro que hay un mundo de misterio esperando ser compartido. Nos cuenta que era justamente en sitios como este que se tomaba el té hace cientos de años, ya que, por la mala calidad del agua en aquellos tiempos, aparte de hervir el agua se recomendaba mezclar la bebida con gin o whiskey para evitar posibles enfermedades.
Existen cinco tipos de té: blanco, verde, oolong, negro y pu-erh. Cada uno se prepara de forma distinta. Lo que se debe saber es lo siguiente:
La temperatura del agua
Es indispensable hervir a la temperatura requerida sin dejar jamás que llegue a borbotones, ya que se perdería el oxígeno necesario para catar la bebida. A falta de termómetro, Andrés Jurado nos comparte que los chinos utilizan estas cinco etapas visuales para distinguir la temperatura:
-Comienza a calentarse el agua y surgen burbujas del tamaño del ojo de una hormiga (68-78 grados). Ésta es la temperatura ideal para preparar té blanco proveniente del brote de la planta Camellia sinensis.
-Burbujas del tamaño del ojo de una rana (80 grados).
Té verde u oolong.
-Burbujas del tamaño de una perla (85 grados).
Té verde o negro.
-Burbujas del tamaño del ojo de una vaca (90 grados).
Té negro o el exótico pu-erh.
El tiempo que pasa un saco dentro de la taza
El té verde no debe pasar más de 2 minutos dentro del agua porque se amarga. El té negro puede reposar de 3 a 4 minutos. Las infusiones o tisanas pueden pasar más tiempo en el agua, ya que son flores y frutos, aunque el tiempo recomendable son 5 minutos. Igualmente se puede infundir (verbo correcto a utilizar) en agua fría o al tiempo por varias horas sin miedo a que se amargue el brebaje.
Add ins
Finalmente, algo de extrema importancia es no aplastar la bolsita porque dejaría caer sedimentos indeseables. Después de eso, Andrés nos recuerda que el té se bebe al gusto: entonces se le pueden añadir edulcorantes, leche o limón, aunque no recomiendan los dos últimos juntos, ya que se cortaría el brebaje. Y no olvides que dar sorbos ruidosos al probar el té es bien visto y ayudará a oxigenar la bebida, lo que aporta mejor sabor.
III. Primer concurso de coctelería a base de tés
Estamos a la espera del primer concurso de coctelería a base de tés Twinings, y mientras tanto, algunos concursantes se encuentran practicando trucos detrás de la barra. Desde su indumentaria y accesorios de trabajo, hasta los rápidos movimientos de mano recuerdan un poco a la figura del mago. Y tampoco están tan lejanos a ella, ya que un buen bar tender (como algunos prefieren ser llamados) debe poder casi leer mentes para mantener a su cliente en el nivel perfecto de happycuando está celebrando, o hacer llegar un trago a tu mano y pasar por invisible cuando el día ha sido perro. Cada participante tiene 10 minutos para preparar y presentar su coctel. Es el método preciso para dejar ver su personalidad, y justamente eso es lo que busca Twinings of London: un nuevo embajador en México que, al expresar su oficio, logre transmitir sabiduría y clase. Felipe Guajardo del Gin Gin abre el concurso sin poder evitar un buen shake no sólo del vaso, sino de sus manos temblorosas. La atención del público se centra en él mientras deja caer una larga cascada que va de una tetera a una copa de martini helada. Sake, pistaches, flores aromáticas, leche de soya y té verde para Zach Barnhill de Artemisia, una total inspiración de Oriente. Posteriormente, Ricardo Nava cuenta una historia sobre su trago Four O’ Clock Punch, que habla de la hora del té compartida desde la clase trabajadora hasta her majesty, the queen of England. Se expresa con confianza sin dar paso en falso y entrega un brebaje frutal, dulce, amargo y fresco a la vez, a base del té English Breakfast. Después de otros cuantos contrincantes, Nava, el actual jefe de barra de la licorería Limantour Polanco, es nombrado primer lugar.
Esta tarde, have A Taste Of Class, y a las cuatro en punto brinden con un ponche con piquete. Aquí la receta ganadora.
· 60 ml Jarabe de Twinings English Breakfast Tea
(infusión caliente)
· 120 ml Whisky Johnnie Walker Gold Label Reserve
· 30 ml Dubonnet
· 40 ml Aperol
· 5 Dashes de Angostura Bitter
· 50 ml Jugo de limón amarillo
· 30 ml Jugo de naranja
Se sirve en una copa ancha, con canela en palo, rodajas de naranja y rodajas de limón amarillo para decorar.
IV. Twinings Tea Truck
Estacionado a un lado de la banqueta, elegante, callejero y sobre todo a la mano del transeúnte a la hora del té, el Twinings tea truck llega a nuestra ciudad con el fin de conquistarnos. Esta nueva iniciativa de Twinings surge de querer unirse a la tendencia del food truck. Los coquetos camioncitos que estarán estacionados a horas del té ya sea matutino o vespertino en las zonas de Polanco, Roma y Condesa, ofrecen la experiencia del Twinings Taste of Class al obsequiar muestras y consejos. A cargo del vehículo encontrarán representantes de Twinings que han sido ataviados y seleccionados de acuerdo con la marca y que aparte de entrar fácilmente por la mirada, son expertos en té. Cualquiera de estos expertos sommeliers pueden asesorarte sobre temas de té que van desde cómo prepararlo, a qué temperatura tomarlo o bien combinaciones interesantes que puedes lograr en casa.
texto — Carla Altesor
imágenes — Ulises García
agencia — We Agency